Según informó el Juzgado de Instrucción Nº 2 del Distrito Judicial Norte, las primeras 2 jornadas dee búsqueda de Sofía, serán el 11 y 13 de diciembre, aunque esto sujeto al clima.
Está prevista la participación de cinco vehículos doble tracción, dos drones, 20 efectivos policiales (científica, servicios especiales y rural con coordinación de la Unidad Regional Norte). También están comprometidos dos miembros del CADIC que viajan desde Ushuaia y aportarán un Georadar y un Magnetómetro.
Serán dos jornadas de unas 10 horas de trabajo cada una en distintos lugares de la isla, todos distantes, a aproximadamente 80 kilómetros de Río Grande.
El juez Cesari Hernández encabezará en persona todas las tareas. Agradeció públicamente la colaboración de la Policía de la Provincia “que en todo momento trabaja codo a codo con el Tribunal a su cargo, al Cadic y al Superior Tribunal de Justicia por hacer posible estas diligencias”.
“El Juzgado no va a bajar los brazos y seguirá buscando la verdad cada día”, reveló el juez.
10 años sin Sofía Herrera: el misterio que todavía desvela al fin del mundo
La desaparición de Sofía Herrera es uno de los grandes misterios que todavía desvela al país. Sucedió el domingo 28 de septiembre de 2008 en el John Goodall, un camping a 60 kilómetros de Río Grande, en Tierra del Fuego. La niña, que en ese momento tenía tres años, había llegado al lugar con sus padres, María Elena Delgado y Fabián Herrera, y otra familia. Ese día desapareció sin dejar rastros. Durante los diez años siguientes la buscaron desde el FBI, Interpol, Gendarmería y Prefectura, hasta la Armada y las Policías Federal y provinciales.
Todo sucedió muy rápido. Esa mañana, María Elena, Fabián y Sofía pasaron por un supermercado La Anónima para comprar carne y pararon en una YPF a cargar agua para el mate. Allí, se encontraron con sus amigos Noemí “Paloma” Ramírez y Silvio Giménez, que estaban con sus dos sus hijos de por entonces 9 y 2 años, y el hermano menor de Noemí, de 6 años. Partieron hacia el lugar en dos autos y tras pagar 15 pesos al cuidador del predio se estacionaron cerca de un alambrado pegado a la ruta 3.
“Apenas llegamos y habrán pasado 10 minutos cuando Sofi despareció”, detalla a PERFIL María Elena. “Nosotros ni alcanzamos a bajar nada de los autos. Quedó ahí la carne, el equipo de mate”, recuerda. Mientras su marido y su amigo fueron a buscar un lugar donde hacer el asado, las mujeres se quedaron en los vehículos esperando. A los hombres los seguían los cuatro niños. Esa fue la última vez que vieron a su hija.
Fuentes: DelLagoNoticias + DiarioPerfil