“Hace más de 420 días que los alumnos de Kayú Chénén no pueden ir a la escuela, primero fue por la pandemia y después por la desidia por parte del Estado de no atender lo que ya sabían que sucedía en varios establecimientos educativos de la Provincia, pero particularmente en la Kayú, que es la única institución de educación especial que tenemos en Tierra del Fuego”, lamentó hoy en Ártika María José Pazos, mamá de un pequeño que asiste a este colegio de Ushuaia.
Pazos explicó que el lunes, en una reunión de la comunidad educativa de la Kayú Chénen, los directivos informaron que “hay actas de inspección desde el año pasado, por las cuales el ministerio ya sabía qué era lo que tenía que hacer por el estado edilicio de la escuela” y disparó: “Queremos que dejen de tirarse la pelota uno al otro, porque en los medios la ministra de Obras y Servicios Públicos, Gabriela Castillo, afirmó que el establecimiento estaba en condiciones, cuando ese mismo día Defensa Civil clausuraba el colegio por una emanación excesiva de monóxido de carbono. Se ve que los ministros están mal informados”.
En este marco, la madre recordó que “apenas asumió este Gobierno, la Legislatura aprobó la Ley de Emergencia Educativa, que justamente es una herramienta para saltear actos administrativos y que no se trabara el trabajo en los colegios por temas burocráticos. Pero estamos a mediados de mayo y los chicos no han podido ir un solo día a la escuela, porque sigue cerrada”.
Por último, Pazos aseveró que “a mi hijo y al resto de los alumnos, les afecta muchísimo no poder ir al colegio” y remarcó que “lo principal es que los niños puedan volver a la presencialidad, aunque no sea todos los días, y que ninguna persona que esté dentro del edificio tenga accidentes o esté en situaciones que pongan en riego su vida o salud”.
Escuchá la nota entera.