El día de hoy conversamos desde los estudios de FM Ártika con Patricia, residente de la localidad de Tolhuin, que ha sido víctima de deficitario sistema de salud de nuestra provincia. Patricia generosamente compartió su historia e hizo un llamado a la reflexión a las autoridades correspondientes.
Actualmente la localidad de Tolhuin cuenta con el Centro Asistencial de Tolhuin y el Centro Modular Sanitario para contener la demanda de salud. No obstante, el descuido en la atención médica deja al descubierto un sistema de salud roto. Hoy te contamos la situación vivida por Patricia en Tolhuin, pero recientemente Belén, una joven de Ushuaia, perdió su vida por una situación similar. ¿Cuántas personas más serán víctimas de la desidia en este sistema sanitario que se ha vuelto tan deficiente?
Si bien su estado de salud de Patricia ha mejorado considerablemente, la odisea sufrida al ser mal diagnosticada dejó como saldo una gran pérdida de capacidad pulmonar.
“Tenía unas molestias, unas dificultades para respirar y bueno, voy por primera vez esa semana, le expliqué a la doctora todo lo que me dolía, tenía como unas puntadas a la altura del omóplato izquierdo y bueno, quien es la primera vez me lo trató como algo, ¿cómo se dice? Como si fuese una dorsalgia o algo así. Me dijo que estaba contracturada, que estaba estresada y bueno, que me sentía tensa, entonces me daba unos calmantes” nos introduce en la situación Patricia.
La segunda vez que voy, otro médico me dice: toma tafirol, que eso te va a hacer bien
En el transcurso de una semana Patricia concurrió 7 veces al Centro Modular, el último día lo hizo por la mañana y por la tarde. Cada una de las veces el diagnóstico siguió siendo el mismo: “Siempre fue dorsalgia según el médico, pasa que se quedaban con el diagnóstico anterior. La cosa es que fueron todos los médicos diferentes“. Le consultamos a Patricia sobre los estudios realizados para llegar a la conclusión del diagnóstico de dorsalgia: “No, absolutamente nada, siempre me inyectaban. Llegó un momento donde me hinché un montonazo, siempre fueron inyecciones, nada más. Solamente me escuchaban, es más, había un médico que ni siquiera me miró a la cara, un doctor muy jovencito que atendía ese día” se quejó Patricia.
a comparación de un médico me siento una ignorante, entonces vos confías en la palabra del profesional. confié, confié, hasta que pasó lo de esa noche.
La noche en que todo se desencadena, Patricia decidió permanecer en el domicilio de su madre, quien resolvió llamar una ambulancia por el estado de padecimiento de su hija: “Sentí en el pecho, a la altura del omóplato, como que se me había trabado, no podía moverme, y empecé a llorar, yo tengo 30 años Lloraba como si fuese una criatura, y ahí es donde mi mamá llama a la ambulancia, y cuando llego al modular, otra vez, empezó uno de los doctores, empezó a golpearme la espalda, como si fuesen palmadas, y me dice, esto puede ser infección urinaria, cuando es muy grave, se te sabe subir el mucho el dolor. La cosa es que ahí me hacen, recién ese último día, me hacen unos estudios de sangre y de orina. Se vio que tenía infección, pero no era infección urinaria. Entonces, se asustaron todos, me hicieron otra vez rayos X, pero ya estaba todo el pulmón lleno de infección, dijo la doctora.”
Patricia es trasladada de urgencia al CEMEP en la localidad de Río Grande e ingresada directamente a cirugía. Luego de dos días intubada recupera la conciencia y manifiesta seguir sintiendo molestias. Le hacen una tomografía y descubren residuos de infección, los cuales fueron eliminados por completo.
La dolorosa realidad es que Patricia perdió un 90% de capacidad pulmonar en el pulmón afectado
Algo que rara vez se tiene en cuenta es el factor emocional en situación de fuerte estrés físico y psíquico: “Fue terrible, te digo, capaz que yo te lo cuento con una intensidad hoy por hoy, nada que ver como yo te lo cuento a cómo realmente fue. Encima lo que más te cuesta por ahí es la parte psicológica, que no solamente sufrís por vos, a medida que yo iba mejorando y evolucionando, había otras personas en terapia intensiva. Estuve 11 días en terapia intensiva y vos sufrís ahí no solamente por lo que te pasa a vos, sino por otras personas también. Y en terapia intensiva ves de todo” explica Patricia.
Patricia, madre soltera, con una hija de 11 años, trabaja en la Legislatura. Como tantos otros argentinos es además emprendedora. Tiene un proyecto donde se desenvolvía como modista, donde con mucho esfuerzo consiguió montar un taller, pero que no podrá continuar, porque le resulta imposible sostener la postura corporal que exige la costura debido a su condición física actual: “Estoy todavía en shock, no sé cómo hacer. Yo tuve que comprar y tarjetear y hoy por hoy tengo una deuda terrible” soltó Patricia.
El doctor me dijo que sí fue mala praxis. ¿Por qué? Porque si eso se hubiese tratado en la primera o en la segunda, hasta en la tercera vez que fui al modular, se hubiese evitado todo.
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