Nos encontramos en los estudios de FM Ártika con el fiscalizador del Colegio de Martilleros, Tasadores y/o Corredores de la Provincia de Tierra del Fuego, Sergio Arroquy.
La situación inflacionaria en Argentina no cede. En enero, la suba fue del 6% y acumuló en los últimos 12 meses un 98,8%, es así que, el costo de los alquileres tendrá un aumento de forma considerable. De acuerdo a la evolución del índice que calcula el BCRA, en marzo el aumento se acercará al 90%. Teniendo en cuenta el último año, el ICL pasó de 1,82 a 3,45. Por lo tanto, si un inquilino solía pagar desde marzo 2022 un costo de alquiler de $ 50.000, ahora deberá abonar un total de $ 94.750 durante 12 meses.
“El problema va a estar cuando terminen los contratos a partir de julio del 2023, que empiezan las renovaciones de la ley nueva, si una persona que está alquilando quiere seguir en el mismo lugar, que se haga la idea que probablemente tenga que pagar alrededor de 400%, por lo menos, por el valor nuevo. Eso es lo que me viene dando masomenos la ecuación de la diferencia de mercado”, expresó Sergio Arroquy.
En la Argentina cada día está más lejos la posibilidad de la casa propia y, en un contexto complicado para alquilar, la situación se agrava con la inflación que se acelera mes a mes. En ese marco, los precios dolarizados de las propiedades complican a las generaciones que quieren independizarse. De acuerdo al último informe que realizó la Dirección General de Estadística y Censo, para acceder a una vivienda de dos ambientes, una pareja con un ingreso promedio apenas alcanza a cubrir menos de la mitad de un crédito hipotecario.
“El problema fundamental que venimos planteando, cuánto hace que lo vengo diciendo, es que hay mucha gente en el mercado del alquiler que debería ser propietario y que no le permite la política ser propietario, porque la política es el peor enemigo del inquilino, la política es el peor enemigo de la población porque le prohíbe comprar su vivienda“, enfatizó Sergio Arroquy.
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