Soledad de Fabio, Vocal representante del sector activo estatal, ante la Obra Social del Estado Fueguino (OSEF), y su par de los pasivos, Andrea Rodríguez Sade, ambas de la Lista Multicolor, lapidaron las decisiones de los titulares de la entidad: “La presidenta y el vice toman definiciones sin consultar ni acordar con las vocales electas”.
“Cuando el presupuesto es chico y los gastos y deudas son grandes no podemos actuar con los hechos consumados, sin previsión, ni planificación. Menos aún cuando desde la presidencia se nos otorga la información a cuenta gotas, de forma mezquina y celosa como si fuéramos parte del desfinanciamiento y vaciamiento de nuestra obra social”, dispararon desde las redes sociales.
Y detallaron: “En la primera y única sesión realizada, la presidenta usufructuó su tercer voto para el desempate. Se trató el presupuesto reconducido. También la estructura y otros asuntos sobre tablas que habíamos pedido consensuar y no fueron consensuados”.
“Sobre tablas presentaron el proyecto de recupero de cuatro millones de pesos de autoprestamos que dieron al personal. Nos encontramos trabajando en este momento en la denuncia correspondiente a los funcionarios que decidieron usar la obra social como servicio financiero. Sin que se transforme en una caza de brujas, vamos a abrir una investigación ya que existe presunto perjuicio económico a la obra social”, comunicaron.
Por otra parte agregaron no estar de acuerdo “con mantener la política de Bertone que nos llevó a perder la autarquía de nuestra obra social y convertirla en un apéndice del gobierno. No queremos que los trabajadores y trabajadoras perdamos voz y voto cuando somos el sostén económico y los destinatarios de la estructura y toda política que se implemente”.
Expresaron que les “preocupa de sobremanera no haber podido definir objetivos y coordinar una agenda de trabajo con los dos representantes del Gobierno, presidenta y vice, dejándonos en una grave posición de desventaja respecto a la función que tenemos. Sin canal de diálogo, hemos sido ninguneadas como representantes de las y los trabajadores. Nos dieron una oficina lejos de donde sucede todo lo inherente a la administración, a la fecha no hemos tenido una respuesta de cuál es el rumbo político que pretende el Gobierno en nuestra Obra Social”.
“Queremos gestionar y trabajar en equipo en función del bienestar de todos y todas . No queremos convertirnos en brazos de gestiones individuales remando contra las decisiones del gobierno. Quisiéramos no tener que atender casos particulares sino, desde lo colectivo, dar una mejorara de forma integral. Creemos en la capacidad y el trabajo de las y los empleados de la obra social, somos trabajadoras como tantos otros estatales, llegamos por el voto de nuestros pares, las y los afiliados. Tenemos la tarea de trabajar en pos de mejorar, pero si el objetivo es otro, que nos lo digan ahora y entonces veremos donde nos paramos. Respondemos a organizaciones gremiales y nos debemos a los afiliados de la Obra Social que son quienes buscan respuestas”.
Por último finalizaron: “Deberíamos estar trabajando en las fuentes de financiamiento, en las soluciones a las sumas millonarias que se deben a los prestadores, en el dinamismo necesario para que las prestaciones lleguen a los afiliados en menor tiempo, en la provisión de medicamentos a nuestras farmacias y no estar a los codazos retaceando la poca información que adquirimos en los pasillos o argumentando la necesidad de trabajar en conjunto cuando por poco no somos enviadas a quedarnos en nuestras casas”.