Los empresarios dicen que aún no fueron convocados y la CGT negó un “congelamiento”. Cristina apuntó contra las empresas y el FMI.
Sergio Massa continúa por estas horas delineando su hoja de ruta para estabilizar la economía después del salto del dólar, que provocó una crisis política en el gobierno. La idea es que las últimas medidas dispuestas disminuyan las tensiones cambiarias -como empezó a ocurrir- y a partir del fin de semana, convocar a un acuerdo de precios y salarios por 90 días.
El ministro de Economía anunció la convocatoria el miércoles durante una reunión en el Palacio de Hacienda con la cúpula de la CGT y referentes sociales, encabezados por Héctor Daer, y el líder del Movimiento Evita, Emilio Pérsico. Massa dijo que le parecía “inexplicable” la remarcación en precios y que quería “sentarlos” en una mesa con empresarios para dar un “sendero de estabilidad”.
“Es un acuerdo de 90 días, un ordenamiento para que no haya traslado a precios y la corrida no impacte. Van a hablar retrotraer algunos precios y estabilizar precios y salarios, que no se convalide la corrida”, explicaron desde Economía. La intención era arrancar este sábado, pero probablemente se resuelva recién en la semana ante la falta de definiciones.
Tanto en la Cámara de Comercio (CAC) como la UIA aseguran que no recibieron una invitación. “No nos llamaron, si nos llaman iremos a escuchar”, señaló el presidente de la central fabril, Daniel Funes de Rioja. Según un sondeo de Clarín, solo las grandes cadenas nucleadas en la Asociación de Supermercados Unidos (ASU) recibieron el llamado para este sábado.
Del otro lado, tampoco confirmaron el encuentro. “No puso una fecha, el fin de semana ordena la agenda para ver cuando convoca la reunión”, dijo Andrés Rodríguez, titular de UPCN y secretario adjunto de la CGT. En un comunicado, la central precisó que la mesa es para “ayudar a la paz social” y “ordenar los abusos”: “Nunca hablamos de congelamientos”.
La expectativa es que se defina luego del acto convocado por la CGT para el martes, al que invitado el líder del Frente Renovador, y que sería su primer paso para impulsar su candidatura presidencial.
Por otra parte, Pérsico advirtió que “hubo precios que subieron un 9% injustificadamente en estos días agarrándose del dólar paralelo” y que Massa “pidió que apretemos juntos a los empresarios para que retrotraigan los precios”.
Las últimas medidas ayudaron a hacer retroceder el blue y calmar los dólares financieros. El volantazo incluyó la fuerte intervención en el mercado de bonos con el uso de reservas, la suba de tasas al 91% nominal anual -un incremento de 10 puntos- y el envío de una delegación a rediscutir el acuerdo con el FMI. Pero la estabilidad lograda todavía parece precaria.
Después de rozar los $ 500 en la semana, la cotización informal bajó este jueves a $ 467. Y el CCL, a $ 457. Esos niveles, todavía por encima de los $ 400 y $ 404 previos a la corrida, gatillaron incrementos en los precios en algunos rubros. Y le puso mayor presión al gobierno para anclar las expectativas inflacionarias. Las consultoras esperan un piso del 8% en abril.
Massa ya había intentado lanzar un acuerdo similar por 60 días en agosto del año pasado. Fue apenas asumió en Economía y luego de que la inflación alcanzara el récord de 7,4%, pero no prosperó. Ahora, busca una señal de respaldo en medio de los tironeos con el Fondo para adelantar desembolsos, a los que este jueves se sumó Cristina Kirchner.
“La inflación se dispara a partir de la firma del acuerdo, entonces la tasa de devaluación tiene que acompañar la tasa de inflación, la principal causa es la variación del dólar”, sostuvo la vicepresidenta en un acto en La Plata, en el que apuntó contra las empresas por las “remarcaciones”. Y llamó a una mesa “para ver cuanto pone cada uno”.