Es el gremio que lidera Sergio Palazzo, diputado nacional del Frente de Todos y que responde políticamente a Cristina Kirchner.
Este jueves, a las 12.30, Sergio Palazzo dará una conferencia de prensa en la sede de La Bancaria, en la que hará oficial el reclamo a las entidades del sector para que se firme una paritaria que tenga como piso un 60% anual y en la que, además, anunciará de manera oficial un paro bancario en todo el país el próximo jueves 28 de abril.
Además de líder del sindicato de los bancarios, Palazzo es diputado nacional por el Frente de Todos y responde políticamente a la vicepresidenta Cristina Kirchner. Otro alto dirigente de La Bancaria, el tucumano Carlos Cisneros, también es diputado nacional.
Según pudo saber Clarín de fuentes del sector, los Bancarios reclamarán un piso del 60% anual en la negociación paritaria de este año, que viene retrasada, y que se espera se vaya actualizando en períodos de tres o seis meses.
Del lado del sector financiero cuestionaron el reclamo del gremio. Tras aclarar que buscan asegurar el “poder adquisitivo de los trabajadores bancarios”, plantearon que el sector no quiere contribuir “a la aceleración del proceso inflacionario”.
Tras varias semanas negociando, la decisión del sindicato será avanzar con medidas de fuerza y mantener el estado de alerta y movilización.
En el primer trimestre, el gremio avanzó con tres sumas fijas de entre $ 14.000 y $ 29.000 según el sueldo que, no obstante, no alcanzaron para paliar el elevado nivel de inflación, superior al 15% hasta marzo, según comentaron fuentes sindicales.
Esperaban cerrar el acuerdo paritario en abril, pero tras fracasar varias reuniones, decidió convocar a un paro con movilización para el próximo jueves 28.
“Durante el día de ayer las cámaras empresarias mantuvieron su misma postura en el Ministerio de Trabajo de la Nación al ofrecer una propuesta insuficiente y dilatar de esta manera el acuerdo salarial, especialmente porque ellos mismos sostienen ante el BCRA el informe REM (Relevamiento de Expectativas de Mercado) un pronóstico inflacionario para el presente año, pero por otro lado pretenden dar migajas a sus trabajadores”, comienza el comunicado de La Bancaria.
Y prosigue: “Tampoco dan respuesta a los restantes puntos presentados y planteados por la Asociación Bancaria, como por ejemplo la regulación de la ley de teletrabajo, guardería universal, tercerizaciones, desarticulación del trabajo bancario, reconversión de los puestos laborales respecto del avance tecnológico, frenar los cierres de sucursales, derogar las circulares del BCRA que permiten brindar servicios financieros por fuera del sistema bancario, entre otros”.
Continúan que “no tienen en cuenta el esfuerzo diario que hacen los trabajadores y trabajadores, la situación del país y las graves consecuencias económicas derivadas de la pandemia”. Y añaden: “Ignoran que el tiempo pasa y las necesidades aumentan, lo hacen mirando para su lado, pues sólo les interesa su rentabilidad y seguir ganando más y más a costa de cada uno de nosotros”.
En el duro comunicado el gremio detalla que se decidió en la “reunión de consejo directivo de la Asociación Bancaria convocar a un paro general para el próximo jueves 28 de abril en todo el país, en defensa del salario y los legítimos derechos que nos corresponden”.
En una de las cámaras que agrupan al sector financiero dijeron a Clarín que el criterio de los bancos es “garantizar el poder adquisitivo de los salarios de los trabajadores bancarios”.
Cuestionaron, además, que el criterio del REM que reclama ahora el gremio nunca fue usado en una negociación paritaria.
Y señalaron que el sector empresario “no quiere contribuir a la aceleración del proceso inflacionario” con una suba salarial como la que reclama el sindicato, que es superior a la inflación actual.
Los bancarios vienen de cerrar un 51% en 2021, apenas por encima de la inflación anual. La expectativa para este año es superar el 60% en la negociación, aunque podría darse a través de acuerdos trimestrales o semestrales.
Palazzo es el principal referente del sindicato, al frente del que asumió en 2005. Con línea directa con los Moyano y el gremio de Camioneros, si bien tiene origen radical, políticamente responde a Cristina Fernández de Kirchner, que lo promovió como candidato a diputado el año pasado. Ya electo en su cargo, apuntala una de las principales negociaciones de paritarias que se deberán resolver en el ámbito del Ministerio de Trabajo.