Nos encontramos en los estudios de FM Ártika con Javier Branca, del Partido de la ciudad.
Año electoral, inflación, brecha cambiaria, factores que dificultan aún más la difícil tarea de encontrar un alquiler que se adapte a las necesidades del inquilino y que esté dentro de su presupuesto. En ese sentido, la necesidad de salir con el dinero en mano para poder reservar en el momento, si se encuentra con una vivienda acorde, se vuelve un requisito indispensable para no quedarse sin techo. Los propietarios se inclinan por los alquileres temporarios en busca de una renta en dólar y contratos flexibles.
“Si el estado municipal, ya habíamos visto en otras ocasiones que vine acá, que el dinero no está blanqueado, en ningún lado, no sabemos, porque aparecen con títulos, que cuando les preguntas a los secretarios, che, y esa plata, en qué la gastan, te dicen, te respondo por escrito, y nunca responden, bueno, hay dinero. Si el estado otorgase créditos hipotecarios, si el estado construyera viviendas, municipal, provincial, nacional, habría una oferta de viviendas que haría caer la demanda de viviendas en alquiler, con lo cual la oferta de viviendas en alquiler, por una relación de ley de demanda y de oferta, los precios se achican”, expresó Javier Branca.
La semana pasada, Nueva York tomó una decisión drástica al prohibir todos aquellos contratos de alquiler temporario turístico de menos de un mes. Aquí, mientras se demora el debate por la ley de alquileres, al Congreso ingresó un proyecto menos ambicioso, pero que también se mete con los alquileres a través de plataformas y tiene como principal objetivo regular el mercado y desdolarizar las tarifas. Y ya rige una ley porteña para crear un registro de “anfitriones”.
“Después tenés medidas que son discutibles, pero que se aplican en los países desarrollados, como por ejemplo en E.E.U.U., sobre todo en New York, dice bueno, de ahora en más vamos a poner un freno a los alquileres temporarios, en Alemania están discutiendo si van a congelar el aumento de los alquileres por tres años, pero en Alemania no hay inflación, entonces, congelar el aumento de los alquileres por tres años en un país que no es inflacionario, es algo más o menos que el estado puede intervenir, que no asesina al dueño del departamento, pero bue, es otra economía, es otra realidad, acá lo que se puede hacer es construir viviendas o dar crédito hipotecario, que no se hace”, comentó Javier Branca.
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