Nos comunicamos telefónicamente desde los estudios de FM Ártika con Marcela Witt, bioquímica con orientación en microbiología e inmunología, egresada de la Universidad de Buenos Aires, con maestría de microbiología avanzada de la Universidad Nacional de La Plata y post grado en microbiota, con quien conversamos sobre el proyecto de ley presentado, y aprobado, en Cámara de Senadores, sobre fluorar la sal de consumo humano.
Este proyecto de ley que propone la fluoración de la sal fue presentado como prevención de la aparición de caries y la pérdida de dientes, fue aprobada por unanimidad por la Cámara de Senadores, en sesión especial, y pasó en revisión a Diputados. La iniciativa tiene por objetivo autorizar en todo el territorio nacional la elaboración, comercialización y consumo de sal de mesa enriquecida con flúor, para colaborar en la prevención de las caries dentales y mejorar la salud bucal de la población.
“El senador, Dr. Pablo Yeblin, que es, además, el presidente de la Comisión de Salud, presentó un proyecto de ley de fluoración de la sal de mesa para consumo humano, ese proyecto de ley fue aprobado en la Cámara de Senadores, por una unanimidad, o sea, recalco lo de unanimidad porque, justamente, siempre se habla de que hay una oposición y que no apoyan indiscriminadamente cualquier proyecto de ley, sino que, lo someten a un estudio, a una evaluación. Bueno, en este caso particular, evidentemente, no solamente en este, sino también en muchos otros, bueno, vemos que no evalúan y simplemente no evalúan, no piensan, no reflexionan, no leen, no se informan”, expresó Marcel Witt.
“Esto es un tratamiento médico masivo”
Esta iniciativa autoriza en todo el territorio nacional la elaboración, comercialización y consumo de sal de mesa enriquecida con flúor en una concentración de 200 ppm a 250 ppm de flúor en la sal. Las sales sin contenido de sodio o con bajo contenido del mismo, podrán ser enriquecidas con flúor en la misma concentración citada.
“También hay un proyecto de fluoración de las harinas, todavía no ha salido a comentarse, pero también, había una idea de fluorar las harinas, nosotros ya sabemos, incluso la OMS hace más de cuarenta años que la OMS clasifica a los fluoruros como contaminantes y como productos químicos peligrosos en sus recomendaciones para la calidad del agua potable, publicada en los años 1958, 1973, 1971, 1976, 1984, 1993, 2004 y 2011, en esa última versión del año 2011, además, de ratificar está clasificación de los fluoruros como contaminantes, reconoce oficialmente que hay evidencia de que su consumo está correlacionado con efectos adversos para la salud”, explico la bioquímica Marcela Witt.
“Cómo puede ser que el Doctor Pablo Yeblin, que él es médico, no conozca todos los daños que produce el flúor”
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